Mejorar el comportamiento en el aula


El alumno presenta problemas de actitud en el aula, tiene actitud provocadora, falta de motivación y rebelión ante las normas y ante la figura de profesor, presenta problemas de aprendizaje debido a unos patrones de conducta incorrectos. Nos vamos a centrar en sus problemas de conducta, no en su persona, y en conseguir mejorar su actitud dentro y fuera del aula.
                   Aspectos a tener en cuenta para mejorar el comportamiento

1.- Los alumnos imitan el comportamiento de los adultos, por lo que para conseguir un comportamiento adecuado, nosotros debemos ser un ejemplo para él.

2.- Concretar el comportamiento: Debemos intentar hablar, preferentemente en términos positivos: "Céntrate en tu trabajo, acaba tus deberes y permanece en tu sitio". Dando estas instrucciones con voz firme y sosegada, poniendo un "punto final" al concluir la frase.

3.- Enseñar soluciones alternativas a los conflictos: trabajar distintos tipos de pensamiento (ponerse en el lugar del otro, consecuencias y causas de una conducta,...), manteniendo charlas individuales con el alumno, conversando sosegadamente, con una relación cordial sin intimidación (hora de tutoría, Plan de Acción Tutorial).

4.- Los elogios por los avances del chico deben de ser concretos, adecuados e inmediatos. Lo que aumenta la probabilidad de que esta conducta se interiorice y generalice.

5.- En caso de castigar al alumno tener en cuenta que:
* Si se usa el castigo demasiado a menudo, el chico se habitúa y deja de ser eficaz.
* Castigar tan pronto como sea posible después de la mala conducta.
* No hay que amenazar con castigarle y luego no seguir adelante, pues la próxima vez no nos tomará   en serio.
* La falta de consistencia y las amenazas vanas conducen a la mala conducta que se convierte en más  firme y resistente al cambio.
* Tener siempre en cuenta que el castigo continuado produce saciación, con lo que deja de ser eficaz.
* Los castigos a que nos referimos aquí se tratan de las pérdidas de refuerzos, como la pérdida del recreo, de gratificaciones, responsabilidades, actividades preferidas,...

6.- Entre los reforzadores que podemos utilizar están los sociales (elogios,...), materiales (juguetes, golosinas...), actividades (ver TV,...) O fichas. El refuerzo puede emplearse con el resto de la clase, para afianzar conductas y actitudes que se estén trabajando con el alumno y ampliar al resto de la clase.

7.- Tener en cuenta que el prestar atención a un alumno/a puede convertirse en un fuerte reforzador. Debemos tener cuidado en el uso involuntario de algunos reforzadores, como las reprimendas.

8.- Un modo eficaz de eliminar comportamientos específicos (malas miradas, hablar sin permiso,...) es simplemente ignorarlos. Ignorar el comportamiento consiste en no hacer el mínimo caso a conductas que desagradan y al mismo tiempo prestar atención y hacer comentarios de las conductas positivas que agradan, sobre todo en compañeros cercanos al transgresor. Por ejemplo, si el chico habla sin permiso en una asamblea, se le ignora totalmente que habla y nos dirigimos a alguien cercano a él diciéndole: "me gusta, Juanito, que estés en silencio cuando Angel nos explica sus ideas,..."

9.- Tener en cuenta la importancia de un ambiente relajado y tranquilo, ya que los entornos tensos, alborotados y desestructurados aumentan la tensión del alumno. Reflexionar sobre qué podemos hacer para tener un entorno de aula tranquilo y relajado.

4 comentarios:

duenhosdeestrellas@gmail.com dijo...

Mari,muy buena entrada,la copiaré.Pasa por mi blog y llevate un premio.Besos

María Martínez López dijo...

Gracias María!!!

Anónimo dijo...

que bueno

Anónimo dijo...

que genia